"El arte como trabajo tiene valor no solo económico, sino social, entre otros; en nuestro medio, tanto nacional como internacional": Roberto Carbajal.
Por Roberto Carbajal.
A través de la historia el trabajo estaba vinculado a la supervivencia aunque ha evolucionado su concepción y naturaleza ;según la visión de la economía clásica es un de los factores de producción junto con la tierra y el capital, y hoy en día agreguemos la tecnología que forman parte del trabajo, la noción del trabajo se consolidó en el siglo XVIII y se concibió como mano de obra asalariada con la llegada de la revolución industrial del siglo XIX . La concepción actual del trabajo surge pues del capitalismo industrial y de la revelación de la moderna ciencia económica.
Si lo vemos desde el punto de vista etimológico la palabra trabajo en la mayoría de idiomas del mundo occidental tomó sus raíces de otras lengua que tienen como significado tareas penosas y dependientes. «En el griego moderno la palabra doulía significa trabajo en general, como transposición directa de la palabra esclavitud en el griego antiguo, douleía, y doulos, esclavo.
Actualmente los sistemas de producción dependen de la fuerza laboral que ejerce cualquier persona tanto con su esfuerzo físico como intelectual .Por otra parte surge la pregunta en el ambiente que más de algún creador hemos tenido que abordar ¿ a que se dedica ?, soy artista, o soy pintor, o soy cuentista, o soy actor , pero el interlocutor lo toma a broma y es que el trabajo artístico ha tenido el estigma de ser una actividad vocacional y no como una actividad productiva que genera un bien ya sea tangible o intangible , al denominado artista se le ve como un desocupado y esto lleva a que el arte se quede en un nivel nada más apreciativo, contemplativo ; sin embargo la actividad creativa y la cultura son recursos económicos muy valiosos que pueden impulsar el desarrollo económico y social. En 2013 el Banco Interamericano de Desarrollo BID lanzó la publicación “La economía Naranja. Una oportunidad infinita”. En este documento se define a la economía naranja como “el grupo de actividades a través de las cuales las ideas se transforman en bienes y servicios culturales y creativos de valor económico”. En cifras de la UNESCO, la industria creativa representó el 3% del PIB de la economía internacional empleando a más de 30 millones de personas, demostrando su importancia e impacto en el mundo.
Con lo anterior se demuestra que el arte como trabajo tiene valor no solo económico sino social entre otros ; en nuestro medio tanto nacional como internacional ; el creador tiene que dedicarse a otras actividades que le sirva de sostén diario en detrimento de su producción creativa . De ahí que si no hay un vínculo patrono-trabajador el arte y el artista no se toma como trabajo, no recibe un salario, no tiene acceso a la salud , ni vivienda; es por esto que es necesario valorar el trabajo creativo y saber que detrás de una obra de arte hay un producto que llevó tiempo e inversión y que se presenta al público para su consumo, debemos ver pues al arte y al artista como un trabajador creativo y las instituciones tanto oficiales como privadas apoyarlo. A lo mejor el ser artista implica haber llegado a un nivel sublime, pero con la concepción de trabajo desde su origen puede ser que no sea un trabajo sino una manera de vivir.
Feliz día mundial del trabajador.