Un total de 839 actas de votación fueron procesadas, en horas de la noche, por el Sistema de Registro de Escrutinio. El resultado de las actas procesadas sólo constituyó el 52.6%, respecto de las actas no procesadas. Por otra parte, los titulares del TSE declararon una recepción de hasta 80%, por lo que definieron que el simulacro fue “exitoso”, y que los mecanismos electrónicos son efectivos.
“Escogimos hacer éste simulacro para obtener certeza de lo que íbamos a hacer el 28 de febrero, y hemos logrado un nivel de éxito muy alto. Uno de ellos es que se superaron todos los obstáculos de logística anteriores. Hemos encontrado otros obstáculos, que no tienen qué ver, específicamente con la logística, sino que de otro tipo,los cuales son superables, son manejables y son mínimos”, dijo el ingeniero de la Comisión Técnica Informativa del TSE, Eduardo Lozano.
El TSE, además, anunció la aplicación de medidas ciber-seguridad, para la encriptación del sistema de cómputo, y la restricción del código fuente de los programas virtuales. Sin embargo, titulares del Estado aún cuestionaron la efectividad del sistema de “marcación” de votos. Y sugirieron, incluso, la intervención de la observación internacional de los resultados, para garantizar la transparencia del mismo.
“Lo más correcto, para transparentarlo, es que se haga una auditoría. Esto, para dejar esa garantía a la población, de que ha sido revisado el sistema”, dijo la presidenta del TSE, Esmeralda Martínez de Barahona.
El Éxito del 80%
A tempranas horas de la noche, el TSE organizó una rueda de prensa, para divulgar los resultados del segundo simulacro electoral, transmitidos por el Centro de Nacional de Procesamiento de Resultados Electorales (CNPRE). Los titulares anunciaron, pues, que el proceso de transmisión y procesamiento de datos fue “exitoso”, y concluyente, para demostrar la efectividad del uso de tecnologías para la digitalización de los datos.
“En cuanto a la transmisión, hemos podido recibir una cantidad muy alta de actas, las cuales están ya en nuestros servidores; algunas ya se procesaron, y en otras estamos ya en el procesamiento de las mismas”, dijo Lozano.
Hasta las 8:25 PM, los resultados declarados por los magistrados eran de 839 actas procesadas, de las 1,595 actas sistematizadas; es decir, que el procesamiento de datos sólo constituyó un 52.6% del total de actas.
Por otra parte, el equipo técnico y titulares del TSE aseguraron que el simulacro registró la transmisión y la recepción del 80% de las actas sistematizadas en el CNPRE; lo cual habría significado un éxito.
“Ese resultado que está ahí, le duela a quién le duela, es un éxito. Está más del 80% de actas recibidas y transmitidas, desde la JRV”, celebró el magistrado Julio Olivo.
Sin embargo, el equipo técnico del TSE declaró que las actas esperadas, originalmente, eran de 4,785, a representar las elecciones legislativas, parlamentarias y municipales. Pero de ese total sólo habrían recibido unas 4,063. Pero, al final, los titulares optaron por recibir sólo 1,595 actas de las JRV, para poner a prueba el sistema.
“Es de hacer notar que no íbamos a transmitir las 8,451 JRV; sólo estamos hablando de 1,595; que son aproximadamente, un 19%”, admitió Lozano.
Los resultados escogidos por los magistrados resultó, para ellos, ser concluyente, para determinar que las disposiciones políticas y tecnológicas eran favorables.
“Vimos de que los sistemas están aptos, tanto el software como los equipos, para recibir eso y más, monitorizando la demanda de procesamiento de los servidores, los cuales fueron muy bajos, y no alcanzaron más allá del 15% o 20%. Por lo tanto, nos sentimos muy satisfechos”, concluyó Lozano.
Cuestionan la Transparencia
En horas de la tarde, el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, cuestionó las disposiciones del TSE, al notificarse un supuesto intercambio en el sistema tecnificado de votación, diferente al que se utiliza en el simulacro. El ingeniero Lozano, por su parte, desmintió la notificación, aclarando que en las elecciones se aplicará medidas ciber-seguridad, para la encriptación del sistema de cómputo, y la restricción del código fuente de los programas virtuales.
“El softwere que se utilizó la semana pasada y éste es el mismo, la diferencia principal es que se hizo un cerrado de la máquina. ¿qué significa eso?, que una media vez instalado el software en las máquinas que usamos, se hace un procedimiento especial. Y es imposible penetrar en ella, cambiarle cualquier cosa al código o a la máquina en sí, si el disco duro fuera extraído, está cifrado con un cifrado garantizado por Microsoft. Por lo tanto, la seguridad está garantizado”, dijo Lozano.
