Por Alessia Genoves
Papa Francisco se expresa en contra de la condena de 26 años de prisión contra Monseñor Rolando Álvarez. Ha sido expatriado de la ciudadanía Nicaragüense, y ordenado a salir a los Estados Unidos, junto con otras 222 personas, acusadas de diferentes delitos. La condena que hoy afronta la impugnó el Tribunal de Apelaciones de Managua, éste 10 de febrero, cuando Álvarez se negó a salir del país.
“Las noticias que llegan de Nicaragua me han entristecido no poco, y no puedo dejar de recordar con preocupación al obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, a quien quiero tanto, condenado a 26 años de cárcel, y también a las personas que han sido deportadas a los Estados Unidos”, expresó el Sumo Pontífice, éste 12 de febrero, en la misa compartida en Plaza de San Pedro.
Monseñor Álvarez a prisión
222 han sido expatriadas de Nicaragua.. Entre ellos, se enumera al menos un ciudadano estadounidense. El Departamento de Estado calificó la liberación de los presidiarios como “un paso positivo”, mientras su situación migratoria deducía que la mayoría de los expulsados prescindirían de nacionalidad. Fueron acogidos por EEUU, pese a que las fueron “sancionados por diferentes delitos graves e inhabilitados de forma perpetua para ejercer la función pública”.
“Traidores a la patria”, es el apelativo con el que se identificó a los ex-presidiarios. Éstas palabras fueron pronunciadas por el presidente de la Sala Penal Uno del Tribunal de Apelaciones de Managua, el Octavio Rothshuh Andonio, en la lectura de la sentencia del pasado 10 de febrero. El apelativo y las causas penales también justificaron el destierro de Monseñor Álvarez. No obstante, éste último se negaría a salir de su país.
Dr. Octavio Rothshuh detalló que el sentenciado habría incurrido en los delitos de “menoscabo a la integridad nacional, propagación de noticias falsas en las tecnologías de telecomuicación e información; obstrucción de funciones agravada, desobediencia o desacato a la autoridad. Todo ello en concurso real y en perjuicio de la sociedad nicaragüense”, tal y como lo leyó en la sentencia.
Entretanto, el Departamento de Estado confirmaría que la situación legal de Monseñor Álvarez sería aún la de un prisionero político. La declaración compartió a la prensa, la subsecretaria de Estado Adjunta de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, Emily Mendrala. “Nosotros continuamos con los llamados para su liberación”, manifestó, ante el reporte de otras decenas de presidiarios, a los que se refirió como “prisioneros políticos”.
Ned Price, por su parte, reiteró que “las sanciones y restricciones -a Nicaragua- aún siguen vigentes”. Mientras que el titular de la Secretaría del Departamento de Estado, Antony J. Blinken, confirmó que los expatriados se encuentran en suelo estadounidense desde el pasado 9 de febrero; y que se les atienden sus necesidades básicas.
Iglesia por Monseñor Álvarez
26 años cárcel es la condena que el Poder Judicial de Nicaragua estableció en contra de Monseñor Álvarez. La primera aprehensión en su contra fue ejecutada desde el pasado 19 de agosto, del año 2022, hasta su ex-carcelación y ex-patriación conjunta con otras 222 personas. Su negación a salir de Nicaragua ahora define su condición jurídica como un interno más del sistema penitenciario.
Papa Francisco se refirió a los hechos como una posible “persecución religiosa en Nicaragua”, según lo informó el portal oficial de noticias del Vaticano (Roma, Italia). Ésta denominación es distinta a la consignada por el Departamento de Estado de EEUU, que se refería al mismo como un “perseguido político”; como también lo es a la expresada por el Dr. Rothshuh, como “traidor de la patria”.
Instó a “que abra el corazón de los responsables políticos y de todos los ciudadanos a la búsqueda sincera de la paz, que nace de la verdad, la justicia, la libertad y el amor, y se alcanza mediante el ejercicio paciente del diálogo”. Refiere ésta petitoria a otros precedentes que señalan al Estado: “expulsó al Nuncio Apostólico, a 18 religiosas de la Orden de las Misioneras de la Caridad, cerró diversos medios de comunicación católicos, quitó la ciudadanía y desterró a sacerdotes”.
Al Papa se sumaron las petitorias de las representaciones episcopales de América Latina. En El Salvador, la conferencia Episcopal expresó su “dolor, preocupación, solidaridad y cercanía con los obispos de Nicaragua, y, con la Iglesia de esa amada nación, especialmente con Mons. Rolando Álvarez”.También manifestó que se realizarán jornadas de oración por Álvarez y los “deportados despojados de sus derechos”
La Conferencia Episcopal de Guatemala reiteraría las petitorias, en su desiderata. El documento publicado éste 11 de febrero, expresaba su solidaridad a Mons. Rolando Álvarez; sus oraciones al vecino país, así como su “respaldo a la Iglesia nicaragûense, a sus abispos y presbíteros, y a todos los que hoy sufren vejámenes por su amor a la libertad”.
Ultimamente, el Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile reitero su solidaridad con las personas ex-patriadas, a las que calificó como “voces disidentes”; así como sobre aquellas personas detenidas. De forma categórica expresó su rechazo ante la aprehensión del obispo Álvarez; dedicó una jornada de oración a la “Iglesia y el pueblo nicaragüense”, y refirió su apoyo a la situación política que ataque a la iglesia de Matagalpa y Esteli, de Nicaragua.
