Por Alessia Genoves
$236 millones USD registra el Ministerio de Hacienda en la recaudación de Impuestos Sobre la Renta (ISR). El dato lo comparte el titular de la institución, Alejandro Zelaya, quien indica que el registro supera en un 7% la proyección del Presupuesto General de la Nación del año 2023, que era de $221 millones USD; y un incremento del 12% respecto de los $210 millones USD adquiridos hasta el mes de abril del año 2022.
$6,584 millones USD, por otra parte, es la proyección de ingresos tributarios totales que Hacienda para el cierre del año fiscal 2023. Ésta previsión definiría un incremento de $1,815 millones USD respecto de los $4,769 millones USD del año 2018. Ello, por tanto, definiría un 38.06% de crecimiento económico, en el rubro de los Ingresos Tributarios.
ContraPunto, sin embargo, informa a sus lectores que los datos compartidos a la prensa por el ministro Zelaya aún no han sido divulgados en el portal de Transparencia Fiscal. Los datos divulgados en el sitio apenas rinden información del primer trimestre de éste 2023; en los que, entre otras cosas, sí evidencia un registro de $119.5 millones USD, que deducen un incremento del 51.4% en las Declaraciones de ISR respecto de los 78.90 millones USD del año 2022. Sin embargo, los Ingresos Tributarios y Contribuciones totales deducen una caída de -$7,7 millones USD.
-$7.7 millones en marzo
$1,789 millones USD es la proyección del crecimiento en las Declaraciones del ISR que reserva el ministro Zelaya, al cierre del año fiscal 2023. Ésta cifra, por tanto, estará adscrita a la previsión de los $$6,584 millones USD que se prevé ingresen al país, en el ramo de los ingresos tributarios.
Pero, hasta el cierre del primer trimestre se observan pérdidas, de acuerdo con el registro de adquisiciones tributarias. Ello se constata en la diferencia aritmética que existe entre los $1,688.9 millones USD recaudados hasta el mes de marzo de éste año, respecto de los $1,696.6 millones USD del año anterior, todo en el ramo Tributario y de Contribuciones. Ello implicaría, por tanto, una caída del -0.5%.
Mayores Ingersos
ContraPunto observa, sin embargo, que no todos los sectores tributarios y no tributarios reportan déficit. De hecho, justo el ramo de los ISR reporta un incremento del 6%, ya que en marzo de 2022 se registraron $629.80 millones USD; mientras que el mismo período el saldo acumulado incrementó a los $667.7 millones USD, o sea, unos $37.9 millones más en un año. También ha crecido el ramo de los Ingresos No Tributarios, pues pasaron de los $61,20 millones USD en 2022, a los $62,40 USD en el primer trimestre de 2023, lo que se traduce en $1.2 millones USD más para éste año.
Creció también el ramo de los Impuestos y Gravámenes Diversos, desde los $16.10 USD en el primero trimestre de 2022 a los $20.10 millones USD en el mismo período de 2023. Pero la situación no fue la misma en el ramo de las Contribuciones Especiales, ya que en años se ha registrado un aporte de $45.20 millones USD; pues el cambio sólo se observaría en una reducción de -$400,000 USD en las adquisiciones de la oferta turística, y en -2000,000 USD en el rubro azucarero. Ambos sectores se compensarían con un incremento de $500,000 USD en las adquisiciones del Fovial y del Transporte Público.
Menos ingresos
Los menores ingresos se observan, principalmente, en el rubro de los Impuestos sobre el Valor Añadido (IVA), donde las pérdidas fueron de -$44.5 millones USD. Ésto pasó porque en el primer trimestre de 2022 se adquirieron $807.20 millones USD en impuestos; pero para éste primer trimestre, sólo se adquirieron $762.7 millones USD, o sea, una contracción del -6%.
Pérdidas de menor impacto se observan en las contribuciones adquiridas de los Derechos Arancelarios, y en los Impuestos Selectivos. El primero demostraría pérdidas de -$4.2 millones USD; mientras que el segundo, pérdidas de -$2.1 millones USD, ya que hubo una caída del -11.1% en la adquisición de impuestos por cerveza y otra del -0.2% en la adquisición impuestos por “armas, municiones y explosivos y similares”.
ContraPunto observa que las cifras hacen notar que las pérdidas en la adquisición del IVA son muy estimables, y mayores a las de la recaudación arancelaria. Hemos tenido presencia en las sesiones plenarias de la Asamblea Legislativa, como en la plenaria N.º 102 en la que se discutió éste 12 de abril la aprobación del Decreto N.º 718, para la aprobación de las “Reformas a la Ley Especial Transitoria de Combate a la Inflación de Precios de Productos Básicos”, que contienen más de 50 grupos alimentarios de la Canasta Básica.
75 votos a favor dieron lugar a la aprobación de dicho decreto. Mientra que las abstenciones y votos en contra advertían que tales medidas no han rendido resultados en la disminución de los precios de la Canasta Básica, como se prometía en el decreto mismo. El ministro Zelaya aclaró a la prensa que “somos una economía de libre mercado”, una situación que impide regular los precios de la Canasta Básica; pero que, además, el consumo de la misma es mayor importaciones que en la producción local.
Por otra parte, la reducción o eliminación del IVA a los alimentos podría constituir una mayor pérdida al Estado, que la que se observa en la reducción de aranceles a la importación de alimentos. Es decir que el impacto sería mucho mayor; y como el Estado no puede regular los precios de los productos que importa, tampoco surtiría efecto la reducción de los precios en las ofertas de productos de la Canasta Básica, pues la mayoría en el mercado son de importación.