La Fiscalía alemana investiga a un alto cargo de la Oficina de Migración y Refugiados de su país sospechoso de haber concedido asilo a personas que no cumplían con los requisitos
La Oficina de Migración y Refugiados de Alemania (BAMF) revisará decenas de miles de peticiones de asilo para comprobar que no se han cometido irregularidades después de que el ente se viese salpicado en los últimos días por un escándalo de corrupción.
El secretario de Estado de Interior de Alemania, Stephan Mayer, anunció hoy en una comisión celebrada en el Parlamento alemán, Bundestag, que se analizarán de nuevo el diez por ciento de las concesiones de asilo que fueron aprobadas en los últimos años, según indicaron a dpa fuentes participantes en la reunión.
La elección de los expedientes se hará de forma aleatoria, indicaron esas mismas fuentes.
La Fiscalía alemana investiga en la actualidad a un alto cargo de la BAMF en la ciudad de Bremen sospechoso de haber concedido entre 2013 y 2016 asilo a al menos 1.200 personas que no cumplían con los requisitos establecidos por la ley.
En la mayoría de casos, de acuerdo con el Ministerio Público, se trataba de ciudadanos kurdos que pertenecían a la comunidad religiosa yazidí.